Este paseo esta pensado para buzos con un mínimo de experiencia.
El operador cuenta con tres equipos completos; si se usa el propio, hay que llevar chaleco, reguladores, tubos; el traje húmedo para esta época debería ser lo más fino posible (2 mm). El Buzo debe tener su brevett.
Dorados, surubíes yacarés, palometas, sábalos, carpinchos, cientos de variedades de aves. Esos son los infaltables compañeros de expedición en una salida de buceo a los Esteros del Iberá.
La jornada comienza con la partida por la mañana desde Mercedes en lancha desde la estancia El Dorado sobre la laguna. Mientras nos abrimos paso entre los camalotes nos dirigimos hacia las nacientes del río Corrientes.
La salida constará de dos inmersiones en el día, por la mañana se realiza el primer buceo; luego de un receso y descanso al medio día, por la tarde se realiza el segundo buceo.
Cada inmersión dura entre 45 y 65 minutos. El apoyo al buzo se realiza con una embarcación que acompaña durante las dos inmersiones. Se observa mucha fauna: dorados, bogas, rayas, vieja del agua, san Antonio, etc.
Una vez sumergidos, los sedimentos le dan un tono ámbar a las aguas limpias, y los manchones de arena clara facilitan la observación de la abundante fauna.
Los buceos son entre 4 y 6 metros, la temperatura del agua 20C y la idea es dejarse llevar por la suave corriente. Los juncales y los bordes de los embalsados (islas flotantes de vegetación entrelazada) son el escondite de peces y lagartos. ¿El broche justo? Los platos típicos del estero que se sirven tras el buceo. |