La Reserva Natural Sierra del Tigre es uno de los imperdibles de Tandil. Con su camino de ripio consolidado de 3,5 km de longitud, ofrece excelentes panorámicas del paisaje y de la ciudad.
El Cerro Venado, de escasos 389 metros , es la altura máxima de la zona , en el acceso a la Reserva está la Estación Biológica , donde funciona el Centro de Interpretación de la naturaleza., allí es posible obtener información acerca de las especies que habitan el lugar.
Entre otras rarezas, que sorprenden no sólo al turista oriundo de la gran ciudad, conviven monos carayá, perdices coloradas, carpinchos, zorrinos, ñandúes faisanes, caranchos, ciervos exóticos, jabalíes, gatos monteses, burros y lagartos, amén de una gran variedad de serpientes de la zona.
La pródiga en vegetación, en la Reserva plantaron raíces álamos, retamas, chilcas, pinos, hierbas medicinales y pasturas. Además se ven cavas y :construcciones de piedra que Fueron levantadas cuando la zona era una gran cantera.
Para los amantes de la escalada se puede realizar este deporte en el Cerro Venado y luego de llegar a la cima descender realizando rappel, es una buena posibilidad de practicar ese deporte cerca de la ciudad de Buenos Aires
La reserva natural Sierra del Tigre está ubicada en lo más agreste y pintoresco del paisaje serrano, próximo a la ciudad de Tandil. Varias cumbres abruptas la atraviesan en sentido diagonal. La máxima altura es de 389 metros (cerro Venado) y desde allí se divisan íntegramente la ciudad y sus accidentados contornos.
La reserva natural Sierra del Tigre tiene una superficie de 142 has, de las cuales 120 has conforman la reserva propiamente dicha y 22 has la llamada estación biológica.
Las sierras corresponden a la formación geológica del sistema de Tandilia. Los afloramientos rocosos ocupan un 40% del total de la superficie, estando el resto representado por estrechas vegas provistas de excelentes recursos forrajeros y numerosas fuentes de agua natural, entre ella la de la famosa Gruta de la Salud.
Algunas pircas y ruinas de casas de piedra realizan el encanto y la sugestión de los contornos. Una red de senderos surca la extensión. Antiguamente sirvieron para transportar la piedra extraída de las canteras. Hay cavas, grutas naturales y otros refugios que brindan protección a los animales silvestres.
La reserva natural Sierra del Tigre está encuadrada jurídicamente bajo los lineamientos de reservas naturales y sus objetivos son bien definidos. Ellas han sido creadas con el propósito de proteger al suelo, a la fauna y la flora. Nuestra reserva natural prevé en primer término la rehabilitación del ambiente primigenio, es decir, los vegetales y animales que la poblaron en tiempos históricos: venados, guanacos, maras, choiques, ñandúes, mulitas, perdices, zorros, zorrinos, piches, patos, cisnes, flamencos y pájaros en su conjunto. Y en el aspecto cultural, se propone a enseñar a querer a la tierra, cambiando un generalizado comportamiento depredador por una mentalidad de respeto y de recogimiento para con la naturaleza.
Sendero de los diálogos
Este sendero también es conocido como De los picapedreros, esta es una propuesta de interpretación en la Reserva Natural de Sierra del Tigre realizada por la Universidad Nacional del Centro, Facultad de Ciencias Humanas, Centro de Investigaciones y Estudios Ambientales (CINEA). Los integrantes del equipo de trabajo: Aldo Ramos, Susana Ricci, Guillermina Fernández, Silvia Valenzuela, Raúl Castronovo Julia Acevedo. Colaboradores: Juan Lavornia, Ana Meineri, Yamila Otamendi.
El “Sendero de los Diálogos” fue realizado por docentes, graduados y estudiantes de la Facultad de Ciencias Humanas, a través de un Proyecto de Extensión de la Universidad Nacional del Centro, en colaboración con integrantes del área de conservación.
Desde el enfoque de la educación ambiental y la interpretación como herramienta, la cual revela significados y provoca la reflexión; este trabajo constituye un aporte para la revalorización de la Reserva Natural Sierra del Tigre, donde está representada una muestra de la diversidad de los recursos serranos pampeanos y parte de la historia socio-productiva local.
El sendero de interpretación, está diseñado, articulando el patrimonio natural y cultural y los procesos de transformación. El tema gira en torno a la conservación del patrimonio natural (geológico, hidrológico y ecológico) y cultural, asociado a los habitantes del pasado.
En relación a los recursos se determinaron dos dimensiones del patrimonio natural: lo geológico asociado a la antigüedad de las sierras, al granito y su meteorización; al sistema de diaclasas y fracturas y su relación con el agua (manantial); lo ecológico-ambiental relacionado a las comunidades vegetales (de roquedales y suelos profundos) y su relación como hábitat de la fauna y usos antrópicos a través del tiempo.
Respecto al patrimonio cultural el eje se centra en la historia picapedrera y se resaltan restos de viviendas, camino, y procesos de transformación artesanal de la piedra.
De este modo esperamos brindar al visitante la oportunidad de estar en contacto con el patrimonio de la reserva y fomentar aptitudes y actitudes; apuntando a que el recorrido resulte en una experiencia significativa sobre la importancia de la conservación.
El sendero, dirigido al público en general que visita la reserva, se realiza en forma autoguiada a través de un trayecto de 900 m y 10 paradas; acompañándose de un folleto que relaciona la información del patrimonio mencionado con aspectos literarios y artísticos que vinculan al hombre con la naturaleza, la ciencia y arte.
Esperamos a través de esta propuesta vincular la educación- recreación y conservación y reflejar algunos pensamientos expresados en el espíritu de la fundación de la reserva, por Huberto Cuevas Acevedo, tales como la importancia de disfrutar de “una enseñanza viva”, la posibilidad de “adquirir la propia educación” y la oportunidad de “naturalizar el arte de enseñar”.